Una instalación fotovoltaica aislada es aquella, que no está conectada a la red eléctrica, sino que depende de las placas solares, para ser totalmente independiente de la red.
En un tipo de instalación aislada es muy importante realizar un buen diseño y un dimensionado correcto de la instalación, pues de este dependerá el buen funcionamiento de la misma.
El tamaño de una fotovoltaica aislada, depende del consumo que se tenga en el lugar donde se quiera realizar la instalación. Para ello, es importante que este estudio y dimensionado lo haga personal cualificado, con algo más de capacidad de la energía que se consume normalmente para garantizar la vida útil de la instalación y de las baterías.
Si la instalación está mal dimensionada y por tanto, se consume más energía de la que se genera, esta tendrá un funcionamiento defectuoso y las baterías se pueden llegar a sobrecargar, dejando de funcionar.
Una instalación de fotovoltaica aislada, cuenta con varios elementos, como son:
- Un controlador de carga: siendo este el encargado de recoger la energía de los paneles solares y transformarla en electricidad para introducirla en las baterías.
- Baterías: normalmente suelen ser de litio, pues poseen ventajas frente a las de plomo, aunque dependiendo el tipo de instalación se toma esa decisión.
- Inversor: la energía acumulada en las baterías se extrae mediante el inversor, siendo su función controlar la carga y la descarga de las baterías y hace que la energía continua se transforme en alterna y alimente los consumos. Este es uno de los elementos más importantes de una instalación fotovoltaica.
La instalación de fotovoltaica aislada se puede realizar de cualquier tamaño, es decir, tanto para grandes empresas como para viviendas de particulares. Normalmente este tipo de instalaciones se suelen llevar a cabo en lugares rurales sin suministro eléctrico.
El tamaño de la instalación se determina normalmente según el consumo de electricidad necesario. Siempre se debe hacer en el caso de máximo consumo para asegurar el funcionamiento durante todo el año.
Estas funciones de diseño, dimensionado, instalación, etc, deben ser realizadas por un equipo de instaladores y técnicos cualificados para evitar problemas posteriores, así como dejar la instalación preparada para futuras ampliaciones si fuera necesario.
Con respecto al mantenimiento que necesita una instalación de fotovoltaica aislada es escaso, solamente conviene revisar las baterías una vez al año para asegurar su funcionamiento. Así como una limpieza anual de placas solares.
Para que el funcionamiento de esta instalación de energía solar fotovoltaica aislada genere su máximo rendimiento y por tanto sea eficiente energéticamente, lo ideal es concentrar el consumo en las horas con mayor radiación solar.
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